Después de 14 años de compromiso, profesionalismo y una calidez humana que marcó a todos quienes compartieron con ella, llegó el momento de despedir a nuestra querida María Teresa Gallardo.
Su despedida comenzó con una sorpresa en la oficina: su escritorio fue decorado con cariño, los compañeros/as la recibieron con abrazos, recuerdos y una merienda compartida. En ese momento también se hizo presente su hijo Nicolás, quien le entregó flores, regalando un instante emotivo y lleno de gratitud.
Días después, nos reunimos para compartir un asado en el quincho. Fue una jornada para conversar, reír y recordar tantos años de trabajo conjunto. En ese espacio se le entregaron presentes por parte de la empresa, además de un regalo muy especial de parte de las y los trabajadores, como símbolo del gran cariño que deja en cada rincón de la empresa.
Uno de los momentos más emotivos fue la proyección de un video preparado con saludos y palabras de despedida por parte de las dotaciones de los tres buques. Tere, recibió estas muestras de cariño con profunda emoción, sorpresa y agradecimiento, valorando cada mensaje grabado con tanto afecto desde alta mar.
Gracias, Tere, por tu alegría, tu dedicación y por tantos años de entrega. Te llevas el reconocimiento de una etapa cumplida y el cariño profundo de todos nosotros.
